La lista de deseos de los inversores
En muchos países, durante la Navidad los niños escriben a Papá Noel una carta con los regalos que quieren recibir. ¿Qué pasaría si los inversores pudieran hacer algo parecido? ¿Cuáles serían sus deseos para 2025?
Crecimiento: Un crecimiento económico positivo y sólido en las regiones clave como EE.UU., Asia y Europa sería clave para un año próspero en los mercados financieros. En Estados Unidos, el panorama económico parece estable, impulsado por un consumo sostenido. Así, los recortes fiscales y la desregulación podrían incluso dar un nuevo impulso al crecimiento, mientras que los aranceles y la deportación de trabajadores inmigrantes podrían tener el efecto contrario. Europa y China aún tienen margen para sorprender positivamente con sus cifras de crecimiento, lo que podría alentar la confianza global.
Inflación moderada: 2021 y 2022 sirvieron para recordar el impacto que un repunte rápido e inesperado de la inflación puede tener en los mercados. Aunque la inflación ha seguido disminuyendo, en general, en 2024, la tendencia se ha estancado recientemente, sobre todo en Estados Unidos. Aunque sin duda sería de gran ayuda que la inflación se acercara más al objetivo del 2% fijado por los bancos centrales, todavía no se puede dar por hecho que se alcance. También dependerá de las políticas que adopte el nuevo Gobierno estadounidense.
Proteccionismo limitado: Un menor comercio, una competencia más limitada, así como un menor nivel de especialización y menos economías de escala en la cadena de suministro serían negativos. Cuanto más pragmática sea la nueva administración estadounidense en su política comercial, el escenario global será más favorable.
Recuperación del sector manufacturero: Echando la vista atrás, el motor del crecimiento mundial en 2024 podría caracterizarse por presentar un fuerte sesgo hacia el sector servicios. Por su parte, el manufacturero se contrajo o, como mínimo, registró un crecimiento débil. Recientemente, los índices de gestores de compras de EE.UU. para los nuevos pedidos se han reforzado ligeramente y podría terminar pronto la prolongada fase de reducción de inventarios (véase el Gráfico de la Semana).
También en países como Alemania y China, los principales indicadores adelantados del sector manufacturero se han mantenido en unos niveles moderados. Además, un mayor crecimiento podría generar una mayor amplitud en los mercados de acciones y una recuperación de aquellas empresas de mediana capitalización. En este contexto, se abren nuevas oportunidades de crecimiento y diversificación para los inversores.
Un rayo de esperanza para el sector manufacturero de EE.UU.: ¿Recuperación de nuevos pedidos y fin de la reducción de existencias?
Fuente: LSEG Datastream, AllianzGI Economics & Strategy, 11.12.2024
Claves de la próxima semana
La semana que viene estará marcada por una serie de datos y decisiones sobre la dirección de los tipos de interés. El miércoles, la atención se centrará en los resultados de la reunión del Comité Federal de Mercado Abierto (FOMC) de la Reserva Federal de Estados Unidos (Fed). El mercado espera un nuevo recorte de 25 puntos básicos, pero todavía no está claro por parte de la Fed ni cuándo ni cuánto bajarán los tipos, al menos en relación con lo que se esperaba hace unas semanas.
Además, habrá que estar atentos a los siguientes datos:
- El lunes se publicarán los informes de noviembre sobre el sector manufacturero chino, las ventas minoristas y la inversión en activos fijos (bienes tangibles de larga duración utilizados para la producción de bienes y servicios);
- El mismo día se conocerán los índices preliminares de diciembre de los gestores de compras de la zona euro, Reino Unido, Japón y EE.UU.;
- El martes, se publicarán otros indicadores de confianza en Alemania (índices ifo y ZEW);
- El miércoles, las cifras de inflación de Reino Unido;
- Por su parte, el jueves habrá que estar atento a la decisión del Banco de Japón sobre los tipos y a los datos sobre los mercados laboral e inmobiliario de EE.UU.;
- Por último, el viernes conoceremos el Índice de Precios de Gastos de Consumo Personal de EE. UU. (PCE).
En 2024, muchos inversores podrán echar la vista atrás y disfrutar de un año de sólidas rentabilidades. Como tal, algunos deseos de la lista del año pasado pueden haberse cumplido. Las bases para un prometedor 2025 parecen estar establecidas, aunque existe la posibilidad de que se produzcan altibajos procedentes de varios frentes, especialmente en el ámbito geopolítico.
Les deseo a todos una Feliz Navidad y un próspero 2025.
Atentamente,
Stefan Rondorf
Senior Investment Strategist, Global Economics & Strategy